Letras de cumpleaños....

No hace mucho me han dicho que de cierta manera uno "muere" cuando va a cumplir años  y "renace" al momento de cumplirlos, así lo entendi yo. Bueno pues se acerca mi onomástico y aprovecharé para escribir algunas líneas con la única intención de que se conserven en la inmortalidad.

Agradezco a la buena fortuna por hacerme nacer en la família que nací, , realmente mientras viví con ellos ( mis padres y hermanas) fui felíz y libre, gracias a sus cuidados y cariño estoy seguro no he "cruzado esa línea" que de haberla cruzado, estoy convencido no estaría tan tranquilo escribiendo estas palabras. Uno va creciendo y las batallas y desastres que se van acumulando son únicamente responsabilidad propia y me parece que justo en los momentos límite en alguna parte del cerebro se aloja cierta información proveniente de la formación familiar que lo ayudan a uno a salvarse y salir ileso.

No estoy dispuesto a escribir una letanía que para ser sinceros a pocos podría importar. Qué fortuna haberme topado con esos viejos compañeros de batalla ( algunos siguen hasta hoy)que entienden de la forma en que lo hago yo de que se trata este asunto de vivir. Hay lazos que se van formando desde los primeros tiempos y con todo y las buenas y malas épocas ( como todo en la vida) se fortalecen e increíblemente superan el paso del tiempo. A mis amigos, a mis pocos y verdaderos amigos, les ofrezco una disculpa si en ocasiones he sido impertinente, y también les digo que estoy convencido que son los mejores y más valientes tipos del mundo. Vaya que también he tenido que aprender a recoger los pedazos de mi corazón roto, un beso a todas ustedes, si alguna vez las decepcioné disculpen y nunca olviden que: " a veces estoy bien, a veces estoy down".... A ti, no hay palabras suficientes que puedan describir, a pesar de las idas y vueltas que la vida nos ha dado, la perfección que se siente en el corazón al saber que estas ahí al lado mío. Y a ti mujercita, que me has enseñado a vivir de nuevo, y a sentir lo que es el miedo de que algo malo te suceda, y que día a día me sorprendes y me recuerdas quien fui y quién no debo dejar de ser y que  con el solo hecho de existir has justificado mi vida entera, solo puedo desear que seas feliz y libre siempre...Gracias totales Dios, o como quiera que te llames.

El Guardian......

 Error tras error la vida lo llevó a no tener mas opción que la de estar ahí parado por horas esperando únicamente  la hora de salida y salir de ese lugar detestable en el que tenía que trabajar.

Los días ahí se hacían más largos que en cualquier otro lugar, o al menos eso es lo que le parecía, intentó conseguir otro empleo pero al poco tiempo terminó resignándose pensando que tarde o temprano se acostumbraría y dejaría de afectarle todo lo que veía cada vez que tenía que abrir la puerta principal y llegaba esa maldita camioneta vieja.  Nunca se acostumbró. Nadie podría acostumbrarse a esos lamentos ni a ese olor; ese olor a dolor y sufrimiento que llegaba y no se iba nunca. Su trabajo era simple: anotar entradas y salidas, abrir y cerrar puertas, dar el "rondín" y verificar que todo estuviera en orden y en su lugary y por supuesto verificar que en  la "sala de ejecución" nunca hubieran más personas que las que tenían que estar estar. Algunas veces era necesario ayudar  a limpíar (lo odiaba) lo que quedaba de aquellos espíritus que tenían la desgracia de caer en ese lugar. Tenía que usar un horrible uniforme azul de tono triste, digamos que un color "azul-muerte" que lo identificaba claramente como parte de aquel nefasto lugar.

"SEGURIDAD" en letras grandes y doradas era la palabra que lucía en su pecho y espalda. Al llegar a casa sus hijos le preguntaban, -¿Qué es cuidas Papá?  -Cuido un banco-, les respondía mintiéndoles porque no tenía corazón para mirarlos a los ojos y decirles: Muy bien, la plata que gano para que ustedes puedan comer diario proviene de...

Mucho tiempo pasó y nunca pudo acostumbrarse a aquel lugar, siempre sentía el mismo escalofrío cuando la camioneta llegaba y era momento de abrir la puerta, y ayudar a bajar a esos pequeños inocentes, víctimas del abandono y la crueldad humana chillando, y aullando ¡¡augh!! los aullidos, eran insoportables. Y el olor......el olor del miedo.......

Nunca pudo salir de lugar, tampoco se acostumbró. Cada día era lo mismo, sus hijos crecieron queriendo simpre tener un perro en casa, él siempre se negó,era demasiado. Después de vivir a diario los horrores que se cometían en aquella perrera infernal.,jamás pudo volvera a ver a un perro a los ojos.

Peregrinos, ansias de salir....

Adoro esa sensación  vertiginosa, parecida a un riff de guitarra eléctrica que recorre el cuerpo y se estaciona en la garganta ( si, ahí donde dicen que vive el alma) cada vez que tengo por seguro saldremos a las calles a encontrarnos con lo que "tengamos que encontrarnos" sin ningún plan más que el escaparnos del mundo común y rebelarnos contra la sola idea de abandonarnos a la rutina mecánica y fría que lleva el orden del mundo. Hubo tiempos en que me parecía que el sol era más brillante y los viernes, si, esos viernes duraban mucho más que las horas reglamentarias, y podía suceder cualquier cosa. De día, de noche, esa locura que sólo la primera juventud  brinda, te atrapaba y sólo era cuestión de "dejarse llevar"para que el ciclón te elevará por los aires y sin avisarte te azotara en cualquier parte. Oh, tantos compañeros peregrinos de aquellas andanzas ( algunos siguen hasta hoy) que aún espero conserven el temple en sus corazones y jamás permitan que la corrosión del tiempo ablande su espíritu. Ahora, sigo adorando esa sensación aunque me doy cuenta que el sol ha dejado de brillar como en aquellos tiempos, y las heridas son muchas ahora, y la conciencia que es  la peor enemiga de la improvisación. se vuelve omnipresente, y los tiempos han cambiado, ah, pero,¿que sería de nuestra vida si dejáramos en el olvido esas horas de locura extraordinaria, de la que se forman las grandes historias? Sigamos el camino, viejos peregrinos que aunque la distancia sea cada vez mayor tengo fe en que siempre en algun momento nos encontraremos y el sol brillará como solía hacerlo. y las estrellas no se ocultarán porque saben que tienen que estar ahi...para mostrarnos el camino de regreso a casa.

DESPEDIDA BREVE

Me parece que esa promesa la debes olvidar. Aquella que siempre tuviste la esperanza de ver cumplida. Ni hablar, no es tu culpa, y si lo pienso mejor tampoco es la mía. Únicamente me has conocido en una época muy extraña de mi vida. ¿ Has notado como la gente teme mirarse a los ojos?¿Qué esconden? En nuestros tiempos, sostenerle la mirada a alguien es sinónimo de agresión, nunca de comunicación, de eso tampoco tenemos culpa alguna. Haz lo que quieras, pero por favor no es momento de llorar, sabes bien que ante eso no tengo armas, ni argumentos y que siempre termino asintiendo, o mintiendo, y tarde o temprano la cosa se tuerce y volvemos al principio, esto no viene bien, pero quizá después podamos arreglarlo. No hay nada imposible. Saldré un rato, daré una vuelta, probaré mi teoría de las miradas agresivas y si regreso vivo espero no encontrarte acá. No lo tomes a mal, no termines odiándome, nos veremos después, ¿cuando?, no lo sabemos, me voy, pero antes de irme , prometeme que cuando nos volvamos a encontrar y quiera reconocerme en tu mirada, no sentirás temor...ni mirarás a otro lado.

Opiniones ¡¡

¿A qué le temes?.¿Te da miedo dopar tu espíritu y tu cuerpo a tal grado de acercarte lo más posible a reconocer quién eres en realidad? Porque sabemos bien que nunca es fácil animarte a sacar el polvo debajo del sillón que por toda una vida has preferido pensar que no existe. Todos llevamos una máscara, más o menos elaborada, y decides esconderte en el anonimato del rebaño. Quisiera saber realmente  que pretendes, ahora mismo no se si soy yo quién escribe esto, o es alguien o algo a través de mi mente quien lo hace. Más cerca está la respuesta a la supuesta "verdad"que nadie se anima a buscar con un poquito de ahínco.Sé muy bien que los fantasmas pasados no dan tregua, la maquinaria sigue su marcha, todos en fila, ordenaditos. Mejor cierra los ojos, sigue respirando, no te sobresaltes, guarda silencio. Continúa viviendo así, ten fe. ¿Lo harás? ¿o prefieres bajar la espiral hasta el infierno y después subir al cielo sin temor a nada? Todo mundo escribe, o piensa que lo hace.No pretendo hacerte sentir mejor después que leas esto, deseo que aprietes los puños  porque el tiempo se ha ido. Si no te has dado cuenta ya no eres quien solías ser, ya eres diferente, y mañana sucederá lo mismo, no hay escapatoria. No soy ninguna especie de predicador que vaya dando consejos por la vida, prefiero sonreír y mirar como uno a uno cae por la borda, quizá ese también sea mi destino, pero por el momento prefiero nadar contracorriente y seguir otro camino.

Hundimientos.

La mañana tiene mas niebla que nunca, el tiempo no ha cumplido el pronóstico de mejorar. Los días y las noches se acumulan y se pierden las esperanzas de que el sol se asome y permita ver mejor. Este barco no ha terminado de hundirse, hace ya tiempo que el capitán prefirió saltar por la borda. También he querido hacerlo, pero la fe (o el miedo) me hacen aferrarme a la idea de que aún no ha llegado mi tiempo de cruzar el río, o de conocer el fondo del mar como sería más adecuado suponer en este caso. Nos movemos de un lado a otro ¿ nos movemos? Bueno, hablo en plural porque aunque no vea a nadie a mi lado, me niego a pensar que estoy solo. He perdido tambien a mi sombra, las fuerzas me abandonan sin poder hacer nada. A veces la marea es tan alta que pareciera que ascendemos al cielo para tomar impulso e irnos al infierno, pero el milagro sucede y antes de hundirnos nos detenemos y seguimos a flote. No culpo al destino el ponerme en esta situación, nadie me obligo a subirme a este barco, ni tampoco me obligaron a seguir mi instinto suicida al no querer huir a la primera provocación. Las cosas suceden cuando menos uno lo espera, creo que eso es lo lindo de vivir, de vivir realmente, por favor no te confundas no me quejo del lado en que cayó mi moneda, esta marea bendita me llevará a buen puerto, tengo fe, total, si pude escribir esto...es que sigo vivo.

NUEVOS Y VIEJOS DÍAS.

Despierto. Siento un infierno en la garganta, ahí están las consecuencias de los últimos excesos. Nada se escapa a las consecuencias, no me gusta lo que veo en el espejo y la época en que las líneas del tiempo se acentúan me parece han llegado para no irse nunca más. Eso me tiene sin cuidado. Hoy el sol ha decidido no salir y las calles me parecen más grises que antes. Hay una millón de personas caminando sin rumbo, la gran mayoría con miedo a algo, así las veo yo. No, hoy no me siento bien. Mientras camino me siento orgulloso del auto control que tengo sobre mis emociones, de no ser así y diera rienda suelta a lo que estoy pensando justo en el momento en que un grupito de chicas sonrientes se acerca ya estaría en prisión, o de menos en un manicomio. Yo también voy sin rumbo y aunque me duela aceptarlo debo ser parte de esta maquinaria y me veo obligado a hacer ciertas actividades a cambio de dinero, ni hablar. Casi no hay quién no haga eso en el mundo cuando se hace mayor. Quisiera tener un tequila en la mano y echarle más fuego a mi garganta para 

que arda como el mismísimo infierno en que siento ( a veces)  me he empeñado en convertir mi existencia. Y lo escribo, quizá para nadie,quiero escribir y escribir, porque es una de las maneras que conozco para darle sentido a los días enfermos de rutina. Me niego a nadar los mismos ríos siempre, y por eso hago sonar esa música que me estremece y que ayuda a que la mano se caliente y comience a escribir, la vida sigue afuera, el día se hace más gris. Es hora de inventarse nuevas oraciones para nuevos dioses, y abrirle la puerta a los locos que puedan darle color al mundo. Ya quiero que llegue la noche para que el león salga ( a manera de lobo) y se devore lo que pueda, o así

mismo, o lo que sea. No, no me rindo, no necesito tu caridad, necesito tu tiempo, escribiré y escribiré, de todo y nada, de días iguales y días distintos, buscaré complacerme, no hay otra forma, ni  otra manera que conozca, para hacer la existéncia más llevadera.